Hablar de la palabra y la comunicación con los demás a través de la lectura, nos abre un abanico de posibilidades para ingresar al mundo de la imaginación y la construcción de sentido, al descubrir emociones y sorprendernos con nuevos conocimientos para compartir la magia de lo que leemos.
¿Pero dónde llevamos a cabo ese primer encuentro con la palabra? Me atrevería a afirmar que en la casa o en la escuela, escenarios propicios para iniciar esta experiencia y encontrarnos con la magia de la voz. Con su entonación y ritmo, quien lee en voz alta nos envuelve en la historia, los acontecimientos, los murmullos y nos lleva a viajar por la imaginación y la creatividad.
Son múltiples los beneficios que aporta la lectura en voz alta. Para realizar una buena lectura es importante prepararse, por eso te comparto los siguientes tips:
- Seleccionar la lectura según la edad a quien va dirigida. Es importante escoger textos que motiven; incluir poesía, juegos de palabras, libros álbum y libros ilustrados, recursos versátiles para mantener la expectativa y la atención.
- Preparar la lectura con anterioridad. Necesitamos conocer la historia, hacer una conexión previa, saber en qué momento se realizan las pausas, las preguntas o el instante en que se debe hacer mayor énfasis. Conocer el contenido nos ayuda a prepararnos para jugar con la voz y así atraer más la atención.
- Dominar la respiración. Nos sirve para leer de manera pausada, modulando cada palabra, algunas son fáciles de vocalizar, pero hay otras que requieren mayor esfuerzo, por eso es importante prepararse para la lectura y dedicarle el tiempo suficiente para hacerlo de la manera más calmada posible.
- Variar el volumen y la expresión corporal. Los movimientos y las expresiones faciales son fundamentales en el momento de leer. No se necesita ser actor, pero con ingenio podemos transmitir las emociones y jugar con la voz para generar suspenso, atención y conexión con un ambiente dramático.
- Ejercitar la lectura. Es importante practicar, no todos leemos de la misma manera, cada lector descubrirá poco a poco su propio estilo.
- Involucrar objetos y sonidos. Estos recursos nos permiten ambientar la lectura con el sentido de la historia, los cual nos ayuda a conectarnos con ella y con sus personajes.
- Hacer una reflexión final. Es importante tomarse un tiempo para compartir comentarios sobre la lectura y conocer las opiniones de los demás.
- Cuando leemos en voz alta, atrapamos al otro con la palabra, generamos placer y ayudamos a convertir a niños, niñas, jóvenes y adultos en verdaderos lectores.
- Y para ser consecuente con mis recomendaciones, les comparto un regalo para leer en voz alta:
“Uno llega a ser grande por lo que lee, no por lo que escribe”.
Jorge Luis Borges
Anímate a continuar creando lazos afectivos con tus estudiantes o tus hijos a partir del:
Regalo de la voz.